“El Secuestro De Los Partidos”

Desde la aparición de los Protopartidos, que es el nombre con el que la doctrina política moderna ha bautizado a las facciones políticas que predominaron y dividieron las antiguas repúblicas; antes de la llamada era seudo-científica de los sistemas electorales, como fueron, los clanes de la Italia del Renacimiento, los clubes de las asambleas revolucionarias, los comités electorales, etc. Así como también, los Optimates y los Populares de Roma en el 80 A.c; cuyo líder más importante fue el gran Julio Cesar. En el siglo XII, del Sacro Imperio Romano Germánico los Güelfos y Gibelinos de Federico Barbaroja, y los Jacobinos y los Girondinos en la Francia revolucionaria. Todos han tenido características muy similares.

El Origen de los Partidos Modernos

Partiendo de concepto del origen parlamentario de los partidos externados por el jurista, politólogo y político Francés, Maurice Duverger, considerado por la gran mayoría de los cientistas políticos como el padre de los partidos políticos. En ese sentido hay que señalar, que el moderno partido político como lo conocemos hoy surge en el siglo XIX en el parlamento de Gran Bretaña, con la organización estructural de los Tories y los Whig, quienes representaban al partido conservador y al partido liberal respectivamente. Al igual que los de origen fraccional como el partido Federalista de Alexander Hamilton y el Demócrata-Republicano del gran Thomas Jefferson, fundados en 1792, en contraposición histórica al origen exterior planteado por Duverger.

Sin embargo, si hacemos una retrospectiva veremos de manera inequívoca que desde los Protopartidos hasta 1869, todas las líneas partidarias radicaban en la búsqueda de hegemonías segmentadas al margen de las clases sociales, como fueron. Las luchas entre burgueses y la monarquía, entre conservadores y liberales, entre los Emperadores y los papas. Así como la creación de partidos provenientes de selectos grupos de la sociedad, por ejemplo. Las Ligas Cristianas, los Cuerpos Francos del Báltico y las Cruces de Fuego de Francia etc. empero. Es con la aparición en EEUU del llamado partido de la prohibición fundado en 1869 y con la llamada Sociedad Fabiana Inglesa de 1884 fundadora del partido Laborista Británico, donde se sientan las bases ideológicas para la construcción de partidos como frentes de luchas sociales y populares, elemento fundamental del cual hoy carecemos.

El Origen de los Partidos Dominicanos

Lo primero que hay que señalar es, que el sistema modélico de imitación dominicano nació; al unísono con la independencia de república. Por tal razón, fruto de nuestros orígenes pre-republicanos adoptamos también el modelo de protopartidos o facciones que dominaron el espectro político dominicano hasta principios del XX, como fueron los llamados Rojos, Verdes, Azules, Bolos y Coludos. Sin embargo, ya en 1913 con la promulgación de la ley 5335 se reconoció legalmente la existencia de los partidos políticos, a los que posteriormente se sumaron, el Nacional, el Liberal, el Dominicano, el Revolucionario Dominicano, la UCN, el PRDA hoy partido reformista, el PMD, el PQD, el PRSC, la FNP, la ASD hoy PRM, el MIDA, el PNVC, el MNJ, el BIS, el PRI, la UD, la Estructura, la APD, la UDC, el PLD, el PRSD, DXC, PPC, MODA, PCR, PPD, y muchos otros que existen y han existido.

Maquinarias Electorales

Si bien es cierto que, muchos de estos partidos han jugado un papel importante en determinados momentos de nuestra historia; sobre todo el PRD. No menos cierto es también, que aún cuando todos estos partidos cuentan con los elementos de modernidad definidos por el politólogo estadounidense Joseph LaPalombara. En la praxis, todos sin excepción de ningunos; no son otra cosa que maquinarias electorales. Sin ideologías, sin conexión social, muchos de ellos anacrónicos, y todos con unas directivas masónicas Cuasi-familiares, que representan de manera inequívoca la famosa Ley de Hierro de la Oligarquía expuesta por el gran sociólogo Alemán Robert Michels, totalmente en vigencia. Aún cuando su origen data de un siglo atrás. Y muchos otros, son solo Polipymes como los definió en el país el experto en elecciones, politólogo y abogado argentino Daniel Zovatto.

La Carencia de Democracia

Nunca en el país ha existido ni la democracia interna de los partidos, ni la alternabilidad, ni el multipartidismo formal y electoral. Para confirmar dicha aseveración solo hay que hacer una retrospectiva histórica por ejemplo. Lilis acabó con todos los partidos del sistema desde que asumió el poder, Trujillo hizo lo mismo por 31 años, Balaguer instauró el terror y la persecución de sus posibles contrincantes. Y por igual, todas las disidencias de liderazgos alternativos han tenido un mismo resultado. Nicolás Silfa, Virgilio Mainardi, Juan Isidro Jiménez, Ángel Miolan, Hatuey De Camps e Hipólito Mejia expulsados del PRD, Augusto Lora y Álvarez Bogaert del PRSC, Tonito Abreu, Rafael Alburquerque y Max Puig del PLD. Al igual que muchos otros de diferentes partidos.

Sin embargo, el elemento de mayor gravedad para la Democracia lo representa la falta de alternabilidad, en las estructuras de dirección de los partidos, por ejemplo. Juan Bosch dirigió al PRD por 34 años y al PLD por 27 hasta su muerte, Peña Gómez por 27 años hasta su muerte al PRD, Balaguer al PRSC por 40 años hasta su muerte, Jacobo Majluta el PRI hasta su muerte y desde entonces Trajano quien lleva 21 años, Wessin y Wessin al PQD por 42 años hasta su muerte y después su hijo, Vincho Castillo tiene 37 años la FNP y sigue ahí. Andrés Vanderhorst duró 33 años dirigiendo la estructura y sigue en su directiva, Leonel Fernández tiene 16 el PLD y sigue. Hatuey 13 años el PRSD hasta su muerte y ahora su hijo, Peña Guaba tiene 23 años el BIS y sigue, Luís el Gallo 19 años la UDC y sigue, Zorrilla Ozuna 11 el PCR y sigue. Antolín Polanco 30 años el PASOVE y sigue. Ismael Reyes 31 años el PDI y sigue, Eléxido Paula 27 años el PHD y sigue, Max Puig 25 años la APD y sigue, Pedro Corporán 17 años el PUN y sigue. Y se vislumbran que todos los demás van por el mismo camino!

Solo me queda preguntarles, están secuestrados o no?

Autor: Lic. Manuel Cruz
Abogado, Consultor Político y Comunicador